Piedad y Pasión
- 7 marzo 2020
El conjunto escultórico ha sido realizado en terracota a tamaño académico y policromado a la técnica del óleo, utilizando postizos como lágrimas vidriadas y pestañas en los párpados superiores de la Virgen. La Dolorosa, de pálidas carnaciones y mirada cabizbaja, que nos traslada el verdadero dolor por la reciente pérdida, contempla consternada el cuerpo yacente del Señor, de estudiadas anatomías en su modelado, mostrando todo el sufrimiento en el camino a la cruz, que reposa en el suelo rocoso apoyado en la pierna de su Madre, la cual se encuentra sosteniendo la cabeza y mano izquierda del Señor. A su vez, Éste, deja caer su mano derecha sobre la calavera de Adán, simbolizando el triunfo de la Santa Cruz sobre el pecado original y de la vida sobre la muerte. Cabra 2015.